Debe prepararse en pre mezcla, poniendo en un recipiente mediano la cantidad de producto calculada previamente, al mismo tiempo que se agita con agua; esta pre mezcla, se vuelca en el tanque del equipo de aspersión que ya debe contener por lo menos, la mitad de todo su volumen, que se deberá completar conforme la calibración efectuada, manteniendo todo el tiempo la suspensión en agitación constante. La aplicación debe ser uniforme sobre la superficie del suelo, debiéndose usar boquillas de abanico plano con ángulos de aplicación de 80 grados o más.